Cómo afrontar una reforma en casa
· Antes de iniciar la reforma de tu hogar, conoce los errores más comunes y los mejores trucos para ahorrar, organizarte y disfrutar del resultado final. Emprender cualquier reforma en el hogar es una ruptura a la cotidianidad establecida y un cúmulo de estrés desproporcionado.
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21/10/2025 ― Era inevitable. A pesar de haber ido demorando una y otra vez la necesaria reforma de la casa de campo, llegaba un momento en que ya no se podía aplazar más. Los años no pasan en balde: tras treinta años, las tuberías tenían fugas, la terraza del jardín se había resquebrajado por varios puntos y era el momento ideal para emprender algunas mejoras, como reconstruir la chimenea de leña, ampliar el salón y agrandar el cuarto de baño.
Todo esto suena muy fácil sobre el papel, pero en la práctica es casi como ir a la guerra. Los profesionales te dan la vuelta a la casa en cuestión de días, convirtiendo tu apacible hogar en un auténtico campo de batalla.
Comienza la reforma de mi casa y la guerra con los profesionales
Finalmente, este año nos decidimos a emprender la reforma porque Juanmi, mi marido, tiene un amigo que trabaja en una empresa de transporte y organización especializada en todo tipo de logística. Están acostumbrados a abordar este tipo de situaciones, y eso nos facilitó muchísimo la tarea. Aprovechándonos de su amistad nos lo solucionó todo, además, no nos cobró nada. Él se encargó de prepararnos un programa para coordinar la reforma de la casa y del jardín, procurando que los inconvenientes fueran los mínimos posibles y que pudiéramos seguir disfrutando de una vida más o menos «normal» los fines de semana en nuestra guarida campestre.
El apoyo de los profesionales y albañiles en la obra de casa fue esencial
Las tareas de construcción se las confiamos a Manolo, que trabaja en Marlensa, una empresa especializada en reformas del hogar. La fontanería la está haciendo Julio, el fontanero de la familia desde hace años, que además vive cerca de Madrid. La decoración interior y el jardín correrán por mi cuenta, aunque pienso involucrar a Juanmi los fines de semana.
Respecto a la cocina… veremos. Cuando terminemos la reforma de la casa y el jardín buscaremos una empresa que nos amueble la cocina con un estilo rural, aunque todavía no tengo decidido ni el tipo de muebles ni la distribución.
Me temo que nos esperan unos meses de guerra. Y, sí, probablemente bastante estresantes. — Eva Maricruz.
Mis consejos prácticos antes de iniciar la reforma integral de una casa
Después de todo lo vivido, puedo asegurar que reformar una casa no es algo que se deba improvisar a la ligera. Es una aventura que exige paciencia, organización y una buena dosis de sentido del humor. Por eso, antes de lanzarte a la reforma de tu hogar, te quiero compartir algunos puntos que considero fundamentales.
1. Planifica con tiempo y cabeza
No improvises. Antes de empezar, define bien qué quieres reformar, por qué y hasta dónde puedes llegar. Los proyectos que empiezan con un «ya iremos viendo» suelen terminar con gastos imprevistos y dolores de cabeza.
2. Calcula un presupuesto… y añade un margen para imprevistos
Haz números, pide presupuestos y compáralos, pero ten claro que siempre aparecerán gastos extra. Mi consejo es añadir al menos un 15 o 20% de margen sobre el presupuesto inicial para no llevarte sustos. En las reformas de casa nunca salen imprevistos porque son previstos; siempre salen.
3. Busca buenos profesionales y albañiles
No te quedes con el primero que pase. Pide referencias, visita obras anteriores y valora la seriedad de las empresas o autónomos. Un buen profesional no es el más barato, sino el que cumple con lo prometido y responde ante los problemas.
4. No subestimes la logística
Si vas a seguir viviendo en la casa durante la reforma, planifica cómo organizarás tu día a día. En nuestro caso, gracias al amigo de Juanmi, pudimos coordinar los trabajos para no perder la «vida de fin de semana» en la casa de campo. Sin organización, el caos puede ser total.
5. Controla los tiempos, pero con flexibilidad
Por mucho que se planifique, siempre hay retrasos: materiales que no llegan, lluvias, averías o cambios de última hora. Lo importante es tener una previsión realista y no desesperarse.
6. Cuida los detalles estéticos desde el principio
No dejes la decoración para el final. Muchas decisiones, como la ubicación de enchufes o los tipos de revestimientos, dependen del estilo final que imagines. Es mejor pensar en conjunto desde el inicio.
7. No te olvides del jardín y los exteriores
A veces se empieza la reforma del hogar por dentro y se deja el exterior para «más adelante», pero luego falta energía o presupuesto. Si puedes, intégralo todo en un mismo proyecto, así evitarás duplicar trabajos y costes.
8. Mantén la calma y el buen humor
Por mucho que te agobies, al final todo pasa. Sé que es difícil, pero cuando veas tu casa renovada y adaptada a tus gustos, entenderás que el esfuerzo valió la pena.
Ya te he contado mi experiencia personal en la reforma integral de mi casa, por lo tanto si tienes que emprender alguna obra en tu hogar, quizás te sirva mi análisis.
Te propongo :
Una bonita casa rural para vacaciones ― Aunque residimos gran parte del año en el campo en una zona residencial, este año después de la estresante reforma de la casa decidimos recorrer otras partes de España que no conocíamos y alquilar una casa rural para pasar unas vacaciones alejados de todo lo que nos rodea el resto del año. La clave para poder embarcar a Clara y Eva fue garantizar que tendríamos wifi y podrían estar conectadas en sus mundos virtuales fuera de las horas de las comidas. Eso es innegociable.
912 - El tabaco y el alcohol pueden acelerar el proceso de envejecimiento de la piel, así que trata de limitar su consumo o evitarlos por completo.
♦ Unos pensamientos ►
Las reformas de mantenimiento del hogar no son un capricho, más bien una necesidad que muchas veces pasamos por alto. La degradación de una vivienda es lenta, silenciosa y, precisamente por eso, difícil de percibir. Con el paso de los años, las paredes pierden color, los suelos se desgastan, las tuberías envejecen y pequeños defectos se convierten en averías mayores. Sin darnos cuenta, nos vamos acostumbrando a los desperfectos: una grieta que ya ni vemos, una puerta que no cierra bien o una humedad que «siempre ha estado ahí». Pero todo eso resta confort, eficiencia y valor a nuestro hogar.
Por ello, cada cierto tiempo conviene hacer una pausa, mirar con ojos críticos y preguntarnos en qué estado real se encuentra la casa. Igual que revisamos nuestro coche o nuestra salud, también el hogar necesita su «revisión general». Detenerse, valorar y actuar a tiempo evita gastos mayores y prolonga la vida útil de la vivienda, devolviéndole la comodidad y la armonía que merece.